(Piura).- La Dra. Genara Castillo señala que unión civil entre homosexuales no debería darse porque atenta contra el matrimonio; que es una institución sobre la que se funda la familia, célula básica de la sociedad.
Por Julio Talledo. 13 abril, 2011.(Piura).- La controversial propuesta de formalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo, presentada por el candidato a la vicepresidencia de Perú Posible, ha desatado polémica en los últimos días. Las opiniones son diversas, van desde las que proponen uniones civiles y contratos patrimoniales hasta las que sugieren el matrimonio igualitario entre homosexuales.
En opinión de la doctora Genara Castillo, profesora de Antropología de la Universidad de Piura, “el Perú tiene temas más importantes y urgentes de resolver, que deberían ser planteados en la Campaña electoral, como: la lucha eficaz contra la pobreza y el mejoramiento de la calidad educativa, dentro de lo cual también se incluiría a las personas con esa problemática, como los homosexuales. La solución a los problemas mencionados supone un gran esfuerzo, más inversión y una planificación mejor estructurada”.
La docente de la UDEP señala que la unión civil entre homosexuales no debería darse por dos razones fundamentales: la primera, porque “se atenta contra una institución clave (el matrimonio) que desde sus orígenes supone la conformación libre de un vínculo entre un hombre y una mujer, ordenado al crecimiento del mutuo amor de los cónyuges y a sus frutos, es decir a la procreación-educación de la prole”.
Asimismo, señaló que “el matrimonio es una institución sobre la que se funda la familia, célula básica de la sociedad; por tanto, si se hiere o se destruye, se hace lo mismo con la familia, y como ésta es el corazón de la sociedad, ésta se desestabiliza al atentar contra de la naturaleza del hombre como especie”, anota.
Atentado contra la familia
La doctora Castillo señala también que la propuesta, además de ser inconsistente con la realidad social, cultural y religiosa que se vive en el país, atenta contra el pilar más importante y fundamental: la familia. “Este componente fundamental debe ser respetado y cuidado por todos. De aceptarse una propuesta de esta magnitud, se desestabilizaría toda la vida en sociedad con consecuencias no sólo éticas, sino también psicológicas. Hay que tener en cuenta que las diferencias tipológicas ente varón y mujer tienen el sentido de la colaboración mutua, conservar esas características (de masculinidad y femineidad) es un gran aporte para la vida conyugal, pero además contribuyen grandemente en la educación de los hijos, al desarrollo de su identidad y personalidad”.
La docente de la Universidad de Piura cree que llamarle progreso a la destrucción de la familia y al entorno familiar es retrógrado. “Yo le llamaría un retroceso, puesto que se atenta contra la naturaleza de la persona humana. Políticas de este tipo han sido un suicidio político y fracasan. Lo hemos visto: en California, USA (2000), en Ontario, Canadá (1994) entre otros.
El fracaso de esas propuestas se debe a que las personas todavía tenemos sentido común y sabemos que no es bueno atentar contra nosotros mismos”. “Una propuesta alternativa para con este grupo en particular, que merece respeto y comprensión, sería la creación de centros de salud, educación, capacitación laboral y de ayuda psicológica. Su fin sería lograr que puedan llevar una vida buena, lo que ayudará a hacer crecer su personalidad y autoestima, ya que en muchos casos, aún con protección jurídica, se abusa mucho de ellos.”, declaró.
El dato
En una encuesta realizada recientemente por la periodista Mónica Delta, se demuestra que no sólo le resulta aberrante a la población limeña la idea del matrimonio entre homosexuales sino que la califican de ‘inviable‘.